Una carta esencial.

Y los talibanes

Por Francisco H. Tabernilla

 

 

El jefe de la Oficina de Presupuestos de la Casa Blanca, Mitchell Daniels, advirtió en una carta al presidente de la Comisión de Asignaciones Presupuestarias de la Cámara Baja, Bill Young, que si la enmienda sobre los viajes a Cuba no es removida, recomendaría al presidente George W. Bush vetar la ley de presupuesto del Departamento del Tesoro para el año 2002, que incluye 17 billones de dólares. La enmienda que objeta la Casa Blanca fue aprobada en el pleno de la Cámara de Representantes 240 a 186 el 25 de julio, y prohibe financiar toda actividad dirigida a hacer cumplir las regulaciones del embargo contra Cuba en lo que se refiere a viajes y transacciones relacionadas con viajes a Cuba. En la práctica la medida introducida por el representante Jeff  Flake, dejaba sin efecto las restricciones contra los viajes a la isla actualmente sometidos a licencias del Departamento del Tesoro y en general permitidos únicamente a funcionarios del gobierno y académicos en misiones oficiales, periodistas y personas en misiones humanitarias. Esta enmienda si no es retirada aliviaría el embargo a Cuba, eliminando las restricciones de viajar a la isla. La importante carta señala claramente un recrudecimiento en las relaciones diplomáticas de Estados Unidos y Cuba.                                                      Hebe Pastor de Bonafini, la presidenta de las Madres de la Plaza de Mayo dijo en Buenos Aires: “Cuando pasó lo del atentado y yo estaba en Cuba visitando a mi hija, sentí alegría”. “No voy a ser hipócrita, no me dolió nada…porque siempre digo en mis discursos que nuestros hijos serán vengados el día que el pueblo, algún pueblo, sea feliz”. “Sentí que había hombres y mujeres muy valientes…que se prepararon y donaron sus vidas por nosotros. Y brindé por mis hijos, brindé por tantos muertos, contra el bloqueo de Cuba y todo lo que me venía a la cabeza”.

¿Y cómo puede De Bonafini considerarse una luchadora por los derechos humanos celebrando la infamia del 11 de septiembre, apoyando al régimen de Cuba que prohibe partidos opositores y condena a prisión a críticos pacíficos de Fidel Castro, el tirano de Cuba? Estos elementos no abren la boca cuando los guerrilleros de las Fuerzas Armadas de Colombia (FARC) asesinan a una ministra de Cultura como ocurrió el mes pasado o cuando Cuba condena a prisión a un periodista independiente.

Con el terrorismo no puede haber complicidad, un movimiento que asesina a inocentes es criminal y a los criminales hay que aplicarles la ley para que resplandezca la justicia. Comenzando por bin Laden el mayor inspirador e implicado. La representante Ileana Ros-Lehtinen declaró: “no podemos darle nueva vida a un régimen que ofrece respaldo, albergue e inteligencia a grupos terroristas”. Y el representante Lincoln Díaz-Balart afirmó: “la firmeza y solidaridad del presidente Bush con la causa de la libertad de Cuba no tiene precedentes”. Verdaderamente que la actitud fuerte y decidida del Presidente de Estados Unidos uniéndose una vez más con las ansias y los anhelos del destierro cubano por la libertad y la democracia nos honra y nos llena de satisfacción.

La guerra contra el Talibán continúa hoy, octubre 15,  en su octavo día de bombardeo consecutivo. El bombardeo de hoy a Kabul ha sido en pleno día y el Presidente Bush ha reiterado que el terrorismo no es negociable ni ha cedido a la oferta de Talibán para tratar sobre la entrega de Osama bin Laden “a un tercer país” si Estados Unidos deja de bombardear el territorio afgano. El jefe de inteligencia del movimiento Talibán dijo que un grupo islámico quiere que los jefes de la oposición se sumen a la lucha contra los ataques aéreos de Estados Unidos y al mismo tiempo que emitían el llamamiento a sus odiados enemigos de la Alianza del Norte, lo cual es un debilitamiento del régimen Talibán, insistían en que no se dejarán intimidar para entregar a Osama bin Laden. La enemistad entre el Talibán y la Alianza del Norte data de muchos años, pero el Talibán controla el 90 por ciento de Afganistán, mientras que el 10 por ciento está en manos de la opositora Alianza del Norte.

 

10/15/01

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