No nos dejemos confundir

Por

Francisco H. Tabernilla

 

 

Los medios informativos, buscando notoriedad,  noticia y sensación la mayoría de las veces logran un resultado desfavorable y negativo en contra de la verdad, que es la que debe honrarse en todo tiempo y mucho más en los tiempos de guerra en que vivimos.

Ya sabemos, y el Presidente Bush lo ha repetido “que la campaña contra Bin Laden es sólo la primera batalla contra el terrorismo”. También ha hecho hincapié en pedir a los estadounidenses que deben ser pacientes al entrar en la cuarta semana los bombardeos contra Afganistán, mientras la Agencia Central de Inteligencia (CIA) estudia llevar a cabo operaciones directas contra los terroristas , pero es preciso la determinación de todos, es decir, la misma determinación que están demostrando los militares de la nación en desarticular a los grupos terroristas que tienen su santuario en Afganistán. Indiscutiblemente que el régimen Talibán protege a Osama bin Laden, responsable de ser el cerebro de los atentados contra New York, Washington y Pennsylvania.

El general Norman Schwarzkopf, jefe de las tropas durante la guerra del Golfo Pérsico en 1991, auguró éxito al operativo militar antiterrorista contra Afganistán, agregando que el triunfo está garantizado gracias al apoyo internacional, ya que la situación actual es diferente a la que se dio durante la invasión militar de Afganistán por la antigua Unión Soviética, puesto que las tropas esperaban ganar rápidamente usando armas y tácticas convencionales.

“Será una guerra larga y en varios frentes”, declaró el secretario general de la Casa Blanca, Andrew Cart, afirmando que extirpar las redes terroristas “podría tomar años”. El jefe de la diplomacia británica, Jack Straw habló sobre “claros éxitos militares”, permitiendo dañar las defensas antiaéreas de los talibanes y desorganizar la red Al Qaida, acusada por Estados Unidos de ser la responsable de los atentados del 11 de septiembre. “Creemos que la campaña ha sido eficaz y que podemos medir el progreso”, consideró el Secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld, quien desmintió firmemente que Estados Unidos sea reticente a un avance de la Alianza del Norte, opositora al régimen talibán hacia Kabul y hacia la ciudad estratégica Mazar i Sharif (norte) . “Es falso, la Alianza del Norte no fue frenada y tampoco lo será”. Estados Unidos le proveen una ayuda múltiple, añadió. Considerando que los errores son inevitables a pesar de la precisión de un 85 a 90 % de los bombardeos, Rumsfeld expresó una cierta frustración frente a la táctica de los talibanes de poner fuerzas militares cerca de mezquitas, escuelas y hospitales.

Mohamad Omar lanzó una fuerte advertencia a Washington al afirmar que la verdadera guerra” contra Estados Unidos en Afganistán aún no ha comenzado ya que recibirán una lección más amarga que la que le dimos a los rusos”. El líder religioso se refería a la derrota –una de las más grandes de su historia- sufrida por el ejército soviético en Afganistán, donde combatió de 1979 a 1989.

Las guerras se hacen para vencer, en ésta estamos todos involucrados, pero el enemigo está usando otros conceptos ya que el bando islámico radical hace la guerra no para vencer al enemigo, sino para aniquilarlo, para desaparecer sus casas y sus paisajes, a sus niños, mujeres, ancianos y soldados, lo que ellos llaman la “guerra santa” que han querido fabricar desplegando hoy a miles de jóvenes para movilizarlos contra un enemigo al cual quieren borrar de la faz de la tierra. La firmeza, la decisión y el valor de nuestras tropas son los diques que evitarán esta tragedia universal de la justicia y la razón contra el odio y la aniquilación.

Mientras, Fidel Castro, que está furioso por el desmantelamiento de la base de espionaje  Lourdes ordenado por el Presidente Putin, se ha atrevido a afirmar en un editorial del diario oficial Granma que Cuba aumentó sus reclamos y “producen asco” aquellos que como Moscú, “cambian de casaca” e intentan ser capitalistas. Todavía le falta otro golpe más: la congresista Ileana Ros Lehtinen respaldó la medida ante el Comité de Relaciones Internacionales de la Cámara de Representantes que busca una mayor atención a la amenaza terrorista que representa para Estados Unidos el régimen tiránico de Cuba. Solicitando del Secretario de Estado, Colin Powell “una reevaluación de las agencias de inteligencia sobre la verdadera amenaza de Cuba”, no obstante comprometer sus afirmaciones anteriores que minimizaban la amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos, señalando Powell que, en lo adelante se estaría enfocando el rol de esa dictadura en el bioterrorismo global.

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10/29/01

 

 

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