Reto
inaceptable para Castro
Por
Francisco H. Tabernilla
Ví por televisión al tirano de Cuba, Fidel Castro, pronunciar
estas palabras: “Jamás el imperialismo y el capitalismo volverán a Cuba”. Fidel
Castro siempre ha hablado claro en cuanto a su firme propósito de mantenerse en
el poder a toda costa aunque el pueblo se muera de hambre y superviva en la más
espantosa miseria, así es como su régimen de terror puede maniobrar mejor y
controlar a su antojo a la población.
De todas maneras, la visita
del ex presidente Carter a La Habana y sus palabras
de crítica directas al régimen comunista han quedado flotando en el ambiente lo
mismo que las pronunciadas por el Presidente George
W. Bush desde la Casa Blanca y Miami el 20 de mayo
del 2002 durante la celebración del centenario de la instauración de la
República de Cuba en el concierto de las naciones libres del mundo.
Lo que de verdad le ha
dolido a Fidel Castro es el Proyecto Varela, porque es algo que ha brotado
desde dentro del país con el respaldo de 11,000 firmas, por eso la respuesta
silente que ha sufrido. Fidel Castro nunca ha mencionado el Proyecto Varela, lo
quiere desconocer, humillar y aplastar, pero las ideas cuando prenden en el
pueblo avanzan no retroceden. Las 800 marchas organizadas en las 14 provincias
y 169 municipios cumpliendo las disposiciones del acuerdo de la Asamblea
Extraordinaria con sus 780 delegados para culminar con la realización de un
referéndum en apoyo de una reforma constitucional para perpetuar al comunismo
en el poder es una maquinación de Fidel Castro para justificar su premeditado
fin.
El régimen cubano, reporta
la Agence France Presse desde La Habana,
instaló 130,000 puestos donde se recibirán en todo el país a los
ciudadanos que quieran expresar su adhesión a la enmienda. Estos centros de
recepción ciudadana permanecerán abiertos hasta el mediodía del martes 18 de
junio para permitir que “ningún compatriota quede sin posibilidad”de expresar
su opinión, sostuvo al anunciar esta peculiar consulta popular un desafiante Fidel
Castro al decir el miércoles 12 de junio, que el “sistema socialista cubano es
intocable” al momento de iniciar una marcha en el malecón de La Habana gritando ¡Viva el socialismo! ¡Abajo las
mentiras! , caminando una milla antes de dejar pasar a cientos de miles de
esclavos hacia el edificio de la Sección de Intereses de los Estados Unidos.
La propuesta enmienda
constitucional ha obtenido antes del lunes 17 más de 7 millones y medio de
firmas, según un reporte oficial. Osvaldo Payá Sardiñas autor del Proyecto Varela estima que es un reto
que el castrismo no quiere aceptar al afirmar: “Hay dos características
esenciales en el Proyecto Varela. La primera es que tiene como objetivo que los
ciudadanos puedan ejercer derechos fundamentales que son reconocidos como
inherentes a todos los seres humanos y que hoy en Cuba no se pueden ejercer. La
segunda es que se dé la voz al pueblo cubano para que se exprese en una
consulta popular o referéndum. Es un proyecto de ley que consiste en un Referéndum
donde se le pregunta a los ciudadanos si quieren que
las leyes cambien para que garanticen esos derechos que ahora no pueden
practicar aunque la Constitución los enuncia. De esta forma la decisión queda
en manos del pueblo soberano”.
Por otra parte debemos de
aclarar que Fidel Castro no acepta negociación política con Estados Unidos ya
que le ha propuesto a Cuba una negociación global para cuando se reinicien hoy
lunes 17 de junio las conversaciones migratorias entre ambos países. “Hemos
sido francos, indicó Fidel Castro, no negociamos las cuestiones internas, no
negociaremos soberanía. El sistema social y político es intangible”.
Precisamente uno de los puntos planteados por las llamadas organizaciones de
masas que la dictadura cubana planea incorporar a la Constitución, cierra la
puerta a cualquier negociación que pudiera existir con Estados Unidos bajo las
actuales condiciones.
Esto de “intocable” que ha
sacado a la palestra la dictadura no es nada nuevo. El sistema comunista cubano
desde que se instaló en el poder el 1ro. de enero de 1959 se declaró
“intocable”, tesis que acataron todos los gobiernos, inclusive Estados Unidos,
ya que Fidel Castro lleva 43 años ejecutando a miles de cubanos en el fatídico
paredón de fusilamientos, ha destruido la nación, ha organizado y entrenado
movimientos guerrilleros para subvertir a Latino América, trasladó un ejército
de más de 40 mil hombres para pelear en África, en fin, ha hecho lo que le ha
dado la gana bajo la mirada complaciente y hasta cómplice de muchos países de
nuestro hemisferio. Y lo que es más grave aún sigue haciendo lo que le place
cuándo y como quiera. Y nadie lo para…el pueblo de Cuba dirá la última palabra.
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