![]()
El Dr. Bonachea y el
Ejército de
Cuba
El domingo 20 de octubre de 2002 nos dimos cita un grupo de militares
profesionales exiliados del Ejército de Cuba en el restaurante “Ayesterán” de Miami para escuchar la brillante conferencia
que nos ofreciera el Dr. Ramón Leocadio Bonachea en horas de la mañana. Hizo la presentación del
profesor Bonachea el Tte. Cor.
Nelson Carrasco Artiles, Historiador Militar. El Dr. Bonachea, expresó el Cor.
Carrasco es biznieto del general mambí del mismo nombre. Siendo Rector del North Hudson Center
Collage, NY, fue el primer cubano que en 1973 compareció ante la subcomisión de
la Cámara de Representantes en Washington, diciéndoles: “No vengo ante este
Comité de señores congresistas a testificar sobre los asuntos internos del proceso
insurreccional contra el comunismo opresor, los asuntos de la nación cubana no
los discute ningún cubano con extranjeros…la época en que ustedes conocían
nuestros secretos murió”. También antes de comenzar su disertación le dio la
bienvenida al profesor Bonachea el Cmdte. Ramón Martínez Morejón
quien con amables frases reconoció lo que para Cuba representaba su patriótica
conducta y sus certeros análisis sobre la situación cubana, ya que no hay
rincón ni hecho en el que haya tratado de escudriñar en busca de la verdad y en
beneficio de la verdad histórica. Las palabras del
Dr. Bonachea fueron de gran valor histórico por lo
que representan a favor del honor de un ejército digno calumniado por la
propaganda comunista de los guerrilleros de Fidel Castro y el Che Guevara,
desde que desembarcaron en tierra cubana el 2 de diciembre de 1956, el
Departamento de Estado de los Estados Unidos y la prensa internacional liberal
que tanto ha tratado y tratan de proteger a Fidel Castro. Bonachea nos
explicó la cantidad de documentos que habían sido desclasificado por Gorbachev que nos han permitido conocer que Fidel Castro
era un miembro ilegal del Partido Comunista desde el año 1949 y que recibía
8,000 dólares mensuales del Kremlin, lo mismo que el Ché
Guevara. También en esos papeles constan que submarinos rusos llevaban armas a
Fidel Castro por la costa de la provincia oriental. Se extendió en
consideraciones sobre el apoyo que recibieron los hermanos Castro del
Departamento de Estado de Estados Unidos hasta conseguir el 14 de marzo de 1958
la cancelación de ventas de armas al ejército cubano que luchaba contra el
comunismo. La campaña de los guerrilleros acusando al ejército de “corrupto”
tuvo eco en la prensa y en el propio Departamento de Estado americano. Jamás se
mencionó los cinco mil miembros de las Fuerzas Armadas fusilados con el sólo
propósito de sembrar el terror, porque ni uno solo de los juicios celebrados
fueron legales. Fidel Castro no aceptó la absolución de los pilotos aviadores y
fueron condenados por su capricho. La venta del tren blindado fue una inmensa
calumnia las tropas al mando del Cmdte Ignacio Gómez
Calderón combatieron por más de 35 horas, se declara una tregua para recoger
muertos y heridos y expone que la rendición no fue por cobardía o flaqueza de
los hombres a su mando, sino por carecer de recursos para seguir combatiendo. Oficiales,
clases y soldados fueron trasladados a
La Habana el 31 de diciembre en el cañonero “Baire” y
otra unidad de la Marina de Guerra.
El Cmdte. Martínez Morejón batió a
un grupo de unos 30 guerilleros
cerca de la base naval de Guantánamo les ocupó documentación marxista-leninista
y una bandera de China Comunista. En visita a la base naval norteamericana
mostró a su Jefe todo lo ocupado, éste coincidió con su pensamiento y le dijo:
“Pero los militares americanos acatamos las órdenes del gobierno civil”. Todo
fue exhibido después en el Ayuntamiento de Santiago de Cuba, la prensa le
prestó poca atención, igual que el propio gobierno batistiano
que siempre quiso ocultar la guerra.
El
Tte. Cor. Nelson Carrasco jefe del batallón 10 de
infantería fue ametrallado en combate por la guerrilla el 27 de septiembre de
1958, una bala le interesó el fémur, fue
hecho prisionero junto con un sargento y tres soldados más, durante esa acción
denominada de Paraná o la Torcaza, en la que fueron recuperados catorce
vehículos secuestrados en la Carretera Central, permaneciendo 97 días
prisionero. Los documentos sobre esta acción fueron copiados de documentos secretos del ejército rebelde por el
historiador Dr. Ramón Leocadio Bengochea.
La
historia de que el Coronel Víctor Dueñas Robert dejó
pasar al Ché Guevara por cierta cantidad de dinero es
otra falacia comunista. Ellos mismos que son maestros en destruir reputaciones
e instituciones inventaban el engaño para desprestigiar al Ejército ante la
opinión pública nacional e internacional. Aquí está con nosotros el Cmdte. Wilfredo Suárez Suquet
cuyo hermano Armando, militar pundonoroso, segundo en mando en el Distrito
Militar de Camaguey fue fusilado injustamente
en silla de ruedas por las hordas comunistas.
Entre
los asistentes notamos, entre otros: Cor. Ret.US Army Esteban Beruvides y su esposa, Cor. José
de la Campa, Cor, Armando Echemendía,
Cor. Florentino Rosell, Cmdte. Wilfredo Suárez Suquet, Cmdte. Roger Rojas Lavernia, Capt. Julio Vals Prado,
Capt. Manuel Guerra Ortiz, Capt.
Mario del Rey Vega, Capt. Luciano Prieto Mursulí, Tenientes J. Villar León, Sergio Gutiérrez, José
Cruz González, Rogelio López, Angel Tejera, M. Cross,
J. Robles, Ing. Ismael González. Como muy bien nos expresó el Dr. Bonachea al preguntarse ¿dónde están los que dicen entregaron
las maletas con miles de dólares a oficiales para denostar al Ejército? En 43
años ninguno de los líderes comunistas ha tenido la osadía de reafirmar esta
calumnia que se ha ido abriendo paso a través del peso de los años para que la
verdad resplandezca y los calumniados muchos ya en sus tumbas puedan descansar
en paz y la página blanca de honor de un Ejército profesional, digno y honrado permanezca
intachable para orgullo de sus miembros y de la patria a quien con tanto amor y
dedicación entregaron su carrera y sus vidas en el cumplimiento de su deber.
Francisco H. Tabernilla
General de Brigada
Ejército de Cuba
.