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Por
Francisco H. Tabernilla
Cada vez que ponemos la televisión, la radio o
leemos un periódico con el fin de enterarnos lo que está sucediendo en el mundo
y a nuestro alrededor cercano nos abrumamos de noticias y hechos que van
recogiendo la historia y nuestro sentir en esta lucha diaria por nuestra
existencia y la esperanza de que vayan desapareciendo los rencores entre
pueblos y naciones donde deben reinar la paz, la justicia y los hombres vuelvan
a ser hermanos.
Pero,
el lunes 2 de diciembre de 2002 abrimos
el periódico local The Palm
Beach Post que nos espeta un gran titular que dice:
“A medida que Castro se vuelve más tolerante, los disidentes pelean entre sí”. ¿Quién
le dijo al periodista Patrick Michael Rucker del Christian Science Monitor que Fidel Castro ha cambiado o tiene
intenciones de cambiar? Todo lo contrario cada día está más firme y decidido en
mantener su dictadura a toda costa. Los disidentes en el régimen comunista de
Fidel Castro –dice Rucker- guardaban silencio. Ahora
voces competitivas amenazan con ahogarse cada uno. Por un lado Oswaldo Payá que representa
un ala moderada y es el autor del Proyecto Varela, una petición
constitucional que demanda mayor protección para los derechos humanos, amnistía
para los presos políticos no violentos, libre comercio y reformas electorales. Y
Marta Beatriz Roque una oposicionista de línea dura, estima que el Proyecto
Varela es inefectivo porque no representa a la oposición cubana. Marta Roque
recientemente fundó la Asamblea para Promover la Sociedad Civil con más de 300
grupos disidentes. Algunos de sus miembros han sido encarcelados, incluyendo al
Dr. Oscar Elías Biscet, quien fue liberado el pasado
mes de octubre después de cumplir una condena de 3 años por colocar una bandera
cubana al revés en una conferencia de prensa. Once millones de cubanos ignoran
la existencia del movimiento oposicionista, expresa Rucker. El fondo del artículo es favorable a Castro ya que
da a entender al pueblo norteamericano que muy poca gente se quiere organizar
contra Castro sin explicar las razones esenciales que son el miedo y la cárcel.
La prensa liberal siempre ha tratado de defender a
Fidel Castro y darle la mayor publicidad posible. Ayer, 1ro.de diciembre
regresó a La Habana después de una visita de tres días a Ecuador, donde asistió
a la inauguración de la “Capilla del Hombre”, complejo arquitectónico y
cultural ideado por el fallecido pintor Oswaldo Guayasamín. En la apertura
oficial de la “Capilla del Hombre” estuvieron presentes los presidentes de
Ecuador, Gustavo Noboa y de Venezuela Hugo Chávez. (Cada viaje de Fidel Castro
al exterior le cuesta al pueblo cubano cientos de miles de dólares, ya que
moviliza una cantidad exuberante de agentes especiales para su protección
personal).
Andrea Rodríguez /AP informa
desde La Habana que los mil delegados que asistieron a un encuentro de
coordinación contra el Área de Libre Comercio de la Américas
(ALCA), acordaron impulsar plebiscitos en las naciones del área para demostrar
el rechazo a la propuesta de Washington. El foro, inaugurado el lunes y
concluyó el jueves 28 de noviembre, aprobó un “plan de acción” para
intensificar el enfrentamiento a la iniciativa de Washington y un llamamiento
de carácter más político.
El
repudio al libre comercio se verá reflejado en las consultas populares como las
llevadas a cabo en Brasil, donde votaron 10 millones de personas y sus
similares en desarrollo en México y Canadá. Los resultados de eso plebiscitos
se entregarán a los ministros de Comercio a finales del año entrante en una
reunión programada por éstos en Miami. Los activistas contra el ALCA buscarán
también articular sus acciones con las campañas contra la Organización Mundial
de Comercio (OMC). El documento exigió además resistir la aplicación de
acuerdos binacionales negociados en Estados Unidos como el Tratado de Libre
Comercio con México y Canadá.
Fidel
Castro, en un discurso de tres horas y media ante
delegados de 41 países dijo: “Hay que hundir al ALCA”, porque ese proyecto es
propugnado por Estados Unidos y está diseñado para devorar las economías
nacionales de la región.
En
la Universidad de Teherán pidió “poner de rodillas a Estados Unidos”, ahora
propone su “hundimiento”, ya que según Castro el ALCA no amenaza solo la
dignidad, amenaza la vida de todos los latinoamericanos. (Aunque Cuba no está
contemplada en la iniciativa del ALCA, Fidel Castro se ha opuesto a ella desde
su lanzamiento en la Cumbre de las Américas 1994,
calificándola de anexionista).
¡Y
pensar que los altos cerebros privilegiados del Departamento de Estado llevan cerca
de 44 años defendiendo y protegiendo a Fidel Castro, pues todavía mantienen la
tesis de que Fidel Castro constituye un equilibrio y un balance necesario en la
región del Caribe y Latino América!
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