SE
INTENSIFICAN LOS MALTRATOS
Por
Francisco H. Tabernilla
La tiranía no cede un
ápice, por el contrario, las golpizas y maltratos a los presos de conciencia se
incrementan por días, tal parece que la intención es exterminarlos uno a uno en
el menor tiempo posible tal es la denuncia que han formulado por medio de El
Nuevo Herald a través del periodista Wilfredo Cancio Isla, prominentes figuras de la disidencia cubana
que observan una escalada de violencia física contra los llamados Grupo de los
75 en las cárceles de la isla.
“Al gobierno cubano se le está yendo la mano”, declaró ayer
lunes 27 de septiembre 2004, Martha Beatriz Roque en conversación telefónica
desde La Habana. “Estamos viviendo el extremo de someter a golpizas a los
presos políticos y es algo que no podemos tolerar con los brazos cruzados” … Martha
Roque alertó a la comunidad internacional sobre el caso de Arnaldo Ramos Lauzerique, condenado a 18 años, quien presuntamente fue
golpeado severamente por dos carceleros el pasado 14 de septiembre. Ramos es
vicepresidente del ilegal Instituto Cubano de Economistas Independientes (ICEI)
y se encuentra confinado en la Prisión Provincial de Holguín.
“Es inadmisible este
ensañamiento con un intelectual, un hombre de 62 años, físicamente débil y de
carácter apacible”, comentó al activista René Gómez Manzano, colega de Ramos en
la Asamblea para Promover la Sociedad Civil (APSC). La esposa de Ramos, la
doctora Lidia Lima, recibió en La Habana la información sobre la golpiza a
través del testimonio escrito de un compañero de celda, quien relató lo
ocurrido en una carta a su familia en la oriental provincia de Las Tunas. La
doctora Lima se presentó en la Dirección Nacional de Cárceles y Prisiones del
Ministerio del Interior en La Habana para denunciar el incidente pero las autoridades
no recibieron la queja alegando que debía presentarla por escrito. “En estos
momentos no se ha podido determinar si Ramos está en una celda de castigo u
hospitalizado por los golpes”, relató Martha Roque que fue liberada con una
licencia extrapenal por razones de salud.
Mientras, Osvaldo Payá líder del
Movimiento Cristiano de Liberación (MCL), lanzó ayer un llamado por la vida de Luis Enrique Ferrer García, que cumple una sentencia de 28
años en la Prisión Juvenil de Santa Clara. Payá
indicó que el reo se ha declarado “en huelga de hambre hasta el final” en
protesta por los maltratos y golpizas que ha recibido en cautiverio.
“Denunciamos este tratamiento macabro y cruel en las prisiones cubanas y
llamamos a defender la vida de Luis Enrique Ferrer” , señaló el disidente, Premio Sajarov
2002.
Ferrer, de 30
años, es el más joven y quien mayor condena recibió entre los 75 disidentes
arrestados en marzo del 2003. Hasta su detención fue un activo promotor del
Proyecto Varela en el poblado de Palma Soriano, Santiago de Cuba.
Según la Comisión Cubana de Derechos Humanos y
Reconciliación Nacional, en el último año se ha reportado una veintena de
incidentes graves de violencia contra prisioneros de conciencia. “El gobierno
cubano ha actuado con gran mezquindad”, dijo el activista Elizardo
Sánchez, presidente de esa entidad.
Hay que salvar estas dos vidas en prisión y las de todos
los prisioneros políticos que languidecen en las cárceles castristas. Luis Enrique Ferrer García está decidido a morir. Por el
honor de Cuba esa vida debe salvarse. Pedro Luis Boitel entregó su espíritu a Dios a las 3 a.m.,en la Sala Pity del hospital del
Castillo del Príncipe, el 24 de mayo de 1972. término
heroico de su huelga de hambre iniciada
el 1 de abril. Torturado por los carceleros castristas durante su huelga de
hambre a los 53 días en protesta por los alevosos e indignos tratos a sus
hermanos de prisión, por su amor y dedicación a Cuba.
En este crimen
participaron los asesinos Sergio del Valle, Medardo Lemus,
Raúl O´Farrill y los muy repugnantes asesinos de
América, Fidel y Raúl Castro.
El obispo Eduardo Tomás Boza Masvidal,
ante la muerte del héroe expresó: si el
grano de trigo no muere, no da fruto. Por eso, como Cristo, ofrendó su
vida, Pedro Luis Boitel
entregó la suya en aras del patriotismo y por la libertad de su amada Cuba,
como lo hicieron antes, miles de cubanos ante los pelotones de fusilamiento.
Si Luis Enrique Ferrer García
muere, como murió Pedro Luis, no podemos poner en
duda que este crimen será responsabilidad también de los países democráticos,
Estados Unidos, México, España y las naciones y presidentes de América Latina.. Clara Boitel, fallecida en
Miami, madre del mártir, desde Cuba apeló a la OEA, la ONU, la Unión Europea,
América del Norte, Central y Sur, pero ninguno de ellos oyeron sus súplicas…
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9/28/04