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Amenazas de Correa

Por

Francisco H. Tabernilla

 

 

Los cancilleres americanos rechazaron no “condenaron” el martes 18 de marzo, 2008 la incursión de militares y policías colombianos en territorio ecuatoriano el 1 de marzo para atacar un campamento de las guerrillas de las Fuerza Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Estados Unidos votó a favor de la resolución solamente para darle unanimidad a la votación, pero expresó reservas sobre el artículo relacionado con ese rechazo  debido a que “se mencionan hechos muy específicos y no se tienen en cuenta otras medidas expresadas en la Carta de la OEA y Naciones Unidas sobre la “autodefensa” de los países. Esta cláusula tan importante justifica el ataque a la guerrilla de las FARC acampadas plácidamente en terreno ecuatoriano con el beneplácito de las autoridades correspondientes.

          No obstante,  el canciller dominicano Carlos Morales Troncoso anunció la resolución después de 14 horas de debates y conversaciones bilaterales de los ministros convocados de urgencia por los embajadores de la organización a comienzos del mes. Los ministros presentes respondieron con una ovación de pie. No hubo intervención de los cancilleres de Ecuador María Isabel Salvador y Colombia Fernando Araújo,

          El proyecto aprobado es más simple que los propuestos durante el día, aunque contiene ocho  artículos en total, fue forjado en una reunión final de una hora entre los delegados de esos países, más México, Brasil, República Dominicana, Uruguay y el secretario general José Miguel Insulza.

          Esta ha sido la tercera resolución sobre la incursión en 17 días. Primero se pronunciaron los embajadores de la OEA y luego los presidentes del Grupo de Río.

En síntesis, estos son los artículos de la resolución: 1.- Acoge positivamente la declaración de los presidentes del Grupo de Río sobre la incursión colombiana adoptada en Santo Domingo el 7 de marzo. 2.- Reitera la plena vigencia de los principios consagrados en el derecho internacional de respeto a la soberanía. 3.- Reitera la plena vigencia del principio de la soberanía territorial según la carta de la OEA. 4.- Rechaza la incursión de las fuerzas colombianas en territorio ecuatoriano, 5.- Registra las plenas disculpas de Colombia por los hechos y su compromiso de no repetirlos. 6.- Reitera el firme compromiso de todos los estados miembros de combatir las amenazas de la seguridad provenientes de grupos irregulares. 7.- Instruir a Insulza para que ejerza sus buenos oficios en la implementación de un mecanismo de observación y cumplimiento de esta resolución. 8.- Tomar nota del informe presentado por Insulza sobre cómo ocurrieron los hechos.

          En respuesta a amenazas de Rafael Correa de lanzar una nueva “lucha diplomática”, Colombia recordó al presidente ecuatoriano que el campamento atacado y donde aparentemente murió un ecuatoriano “era un sitio de terroristas”. No obstante, la presidencia afirmó en un comunicado de dos puntos emitidos por la noche que acata totalmente “las decisiones de la Organización de Estados Americanos (OEA). Asimismo recordó que el campamento atacado el 1ro. de marzo en suelo ecuatoriano y donde murieron “Raúl Reyes” y otros 24 guerrilleros de las FARC “era un sitio de terroristas que actuaban contra el derecho a la seguridad del pueblo colombiano” .

          Con esta declaración el gobierno de Colombia salió al paso de las advertencias de Correa de lanzar una nueva “lucha diplomática” contra Colombia en caso de confirmarse que uno de los cadáveres era del ecuatoriano Franklin Aizalia ya que Correa precisó que si se confirma la muerte de Aizalia junto a “Reyes”, se trataría del “asesinato de un ecuatoriano en suelo de Ecuador por fuerzas extranjeras”, un hecho que calificó de “extremadamente grave”. Correa de carácter irritante y pendenciero recibió hoy, lunes 24, burlas, risas y gritos de estudiantes mientras  pronunciaba un discurso.

          El embajador de Ecuador en Colombia, Francisco Suescún, no ha retornado a sus funciones en Bogotá lo que mantiene aún críticas las relaciones diplomáticas entre las dos naciones. Suescún aseguró que militares colombianos secuestraban y asesinaban ciudadanos ecuatorianos que “después eran devueltos o disfrazados” como guerrilleros muertos en combate. El comandante de la IX División del Ejército Colombiano, general Jorge Octavio Ardila, en declaraciones a la prensa (Associated Press)  explicó que en el área de Teteyé, a unos 560 kilómetros de Bogotá, cayeron en combate nueve guerrilleros de las FARC, entre ellos el ecuatoriano Antonio Chinchai Jiménez. El general Ardila aseguró que el presunto guerrillero se hallaba instalando explosivos en una zona de erradicación de cultivo ilícitos y que está en la disponibilidad de aportar pruebas que vinculan a Chinchai con las FARC.

          En unos días llegará a Colombia una misión observadora de la OEA que acompañará el restablecimiento de las relaciones entre Quito y Bogotá, según los acuerdos bilaterales pactados entre  los dos países. Que así sea.

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3/24/08

 

 

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