Masivo respaldo a Rosales
Por
Francisco
H. Tabernilla
Centenares
de personas acompañadas de los principales líderes de oposición venezolanos
manifestaron en la ciudad de Maracaibo su apoyo al ex candidato presidencial
Manuel Rosales, a quien la Fiscalía acusa de corrupción. En varios discursos
los políticos manifestaron su apoyo al alcalde Rosales, quien tildó al
presidente Hugo Chávez de “cobarde y traidor del pueblo” y le atribuyó haber
ordenado a la Fiscalía a actuar en su contra y reiteró que su enjuiciamiento es
“una orden de Chávez”, a quien prometió “enfrentar en todos los terrenos”. La
Fiscalía enjuició a Rosales de enriquecimiento ilícito, delito castigado con
tres a diez años de prisión y pidió al poder Judicial que ordene a la policía
su encarcelamiento.
El Tribunal Supremo de Justicia aprobó
el traslado a Caracas del juicio que se le sigue por presunta corrupción al
alcalde de Maracaibo y dirigente opositor, Manuel Rosales, para “resguardar la
seguridad” de todas las partes, informó esa dependencia. Rosales criticó el
traslado de su juicio a Caracas alegando que era violatorio de sus derechos, y
dijo que lo que se busca es “lincharme políticamente”. “Ellos pretenden radicar
ese juicio, llevándoselo del Zuila, violando mis derechos. Esta es una manipulación
y arbitrariedad, un plan político dirigido desde la filosofía de lo que es el
socialismo del siglo XXI, que no respeta la Constitución” , declaró Rosales a
la prensa, al salir de los tribunales de la localidad de Maracaibo. La
magistrada del Tribunal Supremo de Justicia, Blanca Rosa Mármol, consideró como
una “razzia” la medida contra los cuatro jueces del Zulia y dijo a la emisora
local Unión Radio que habrían otros cinco jueces de esa entidad que podrían ser
suspendidos ya que las autoridades lo que buscan es
“seguir
atemorizando a los jueces que ya prácticamente no tenemos jueces
independientes, con honrosas excepciones”.
Un comunicado del partido político Un
nuevo Tiempo (UNT), adelantó que Rosales presentará en Guatemala un documento
en el que detallará “las constantes violaciones
a la Constitución y la persecución política que hace el actual Gobierno
nacional contra el pueblo venezolano y la oposición”.
En sus intervenciones los líderes
opositores coincidieron en alertar sobre las medidas que Chávez anuncia para
contrarrestar los efectos de la crisis global, a las que llamaron el
“paquetazo”. Todos atentos a las medidas que anuncie el Gobierno, porque los
cobres que malgastaron ahora se los quieren sacar al pueblo”, pídió el
gobernador de Miranda, Henrique Capriles. “Compatriotas de la cúpula militar
ustedes tendrán la responsabilidad histórica si reprimen al pueblo cuando salga
a reclamar sus derechos”, indicó el diputado Manuel García. A fines de octubre,
en plena campaña por las elecciones regionales, Chávez acusó a Rosales de tener
intenciones de matarlo y dijo que se
había propuesto “ponerlo preso”.
Este es un asunto muy serio que puede
provocar consecuencias catastróficas para Venezuela, pues los dictadores como
Chávez y Fidel Castro no entran en
ningún razonamiento, y solo permiten que su palabra y su ego prevalezcan.
Por otra
parte, Chávez se está preparando para encarar una crisis social ya que el
creciente dominio del Presidente sobre espacios clave controlados por la
oposición como puertos, aeropuertos y autopistas, medida que se une a la
reciente ola de intervenciones de hospitales y conglomeraos privados de
alimentos, pudiera indicar que el gobierrno se está preparando para enfrentar
una crisis económica y social de gran envergadura, indicaron analistas
expertos, según Casto Ocando de El Nuevo Herald. El presidente venezolano “está
preparándose para responder a eventos como una convulsión social, un
levantamiento popular o una conspiración militar, y al mismo tiempo quitarle capacidad
de maniobra a la oposición”, estimó Orlando Ochoa Terán, analista en temas de
seguridad y defensa basado en Nueva York.
La rapidez de las medidas intervencionistas
se da en un momento en que el país enfrenta su peor crisis económica en una
década, según economistas, y luego de que los sindicatos prochavistas de dos
docenas de organismos estatales, que agrupan a cientos de miles de trabajadores
en empresas como la petrolera estatal PDVSA y la Corporación Venezolana de
Guayana, anunciaron su decisión de salir a la calle a pelear por sus derechos,
expresando abiertas críticas al propio mandatario venezolano. “No esté tan
seguro de que el 90 por ciento de los trabajadores lo seguirán esta vez, como
usted dice”, advirtió el sindicalista Orlando Chirino, líder de la Corriente
Clasista Unitaria Revolucionaria y Autónoma, en respuesta a la orden de Chávez
a la Dirección de Inteligencia Militar y
la policía política, de investigar a los sindicalistas que participaran en
huelgas en organismos públicos.
Según expertos consultados por El
Nuevo Herald, los efectos políticos y sociales de una crisis económica de grandes
proporciones, está poniendo en guardia al gobierno chavista. “Desde el punto de
vista militar, Chávez está reagrupándose y atrincherándose, esperando una
arremetida económica y social muy grande. Está aterrado por la posibilidad de
un nuevo estallido social y teme que el Ejército no salga a defenderlo”,
precisó el analista militar. El economista Alexander Guerrero dijo, “la crisis
le estalló en la cara a Chávez; mientras que las reservas internacionales
continúan estancadas en el rango de $30,000 millones, el gobierno no tiene
acceso a fuentes alternas para financiar el gasto. Al mismo tiempo, el panorama
se complica, porque Chávez tiene que anunciar la devaluación de la moneda,
nuevos impuestos, aumento de salarios y el alza de la gasolina”, medidas
impopulares que en el pasado han provocado fuertes protestas sociales.
3/30/09 000ooo000