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Chávez: A los golpistas les queda poco

Por

Francisco H. Tabernilla

 

 

La situación en Honduras no se soluciona: El presidente de Costa Rica, Oscar Arias que está actuando como mediador entre el depuesto presidente de Honduras Manuel Zelaya y el presidente interino Roberto Micheletti se ha parcializado públicamente al referirse a este último como “golpísta”, sabiendo que el 28 de junio el poder civil con la fuerza que les dan las leyes vigentes cumplió todos los trámites que garantiza dicha Constitución para ordenar, con el respaldo de las fuerzas armadas, la separación de su cargo del presidente en funciones que estaba violando la Constitución al pretender efectuar un referendo para reeligirse en las elecciones señaladas para el mes de noviembre de este año.

          Desde ayer, sábado 11 de julio, 2009, el depuesto presidente de Honduras Manuel Zelaya, se encuentra reunido en Washington con el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, y el encargado para América Latina del Departamento de Estado, Thomas Shannon, informaron sus representantes. “Está reunido el presidente Zelaya  con Insulza y Shannon” confirmó a la AFP el encargado de negocios de la embajada de Honduras que sigue respondiendo a Zelaya en la capital norteamericana, Rodolfo Pastor.

Esta reunión forma “parte de la negociación que se ha venido manejando, ya que el presidente Zelaya quiere retornar a su país y está  buscando la manera de que se logre un consenso” para volver a asumir el cargo, del cual fue derrocado y sacado de Honduras el 28 de junio. La visita de Zelaya a Washington se produce un día después de concluir la primera ronda del diálogo entre representantes del presidente derrocado y el de facto, Roberto Micheletti, en San José, bajo la mediación del mandatario costarricense, Oscar Arias. Estas negociaciones fueron apadrinadas por Washington y recibieron el visto bueno de la organización de Estados Americanos (OEA), que suspendió hace una semana a Honduras de la organización. El gobierno del presidente Barack Obama, ha fustigado el supuesto golpe de Estado en Honduras y pedido la restitución de Zelaya, al igual que la totalidad de los países latinoamericanos. El martes pasado, Zelaya fue recibido en Washington por la secretaria de Estado, Hillary Clinton, quien en ese momento anunció el proceso de mediación adelantado por Arias. Zelaya permanecerá en Washington hasta hoy domingo 12 de julio, indicó Pastor.

          Y hoy domingo el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, acusó a las autoridades hondureñas de haber detenido brevemente a periodistas que trabajaban para el principal canal de televisión del estado venezolano y pronosticó que el pueblo hondureño derrocará al presidente de facto de Honduras, Roberto MIcheletti.

          “A estos generales golpistas les queda poco tiempo”, dijo Chávez, quien siendo coronel dirigió un intento de golpe contra el ex presidente constitucional de Venezuela, Carlos Andrés Pérez. Tras ser liberados los periodistas del canal venezolano fueron confinados en el hotel donde se alojaban mientras cubrían las repercusiones del “supuesto” golpe de estado del 28 de junio en el que fue derrocado el presidente constitucional Manuel Zelaya, aseguró el presidente de Venezuela.

          Hablando en su programa dominical de televisión, Chávez dijo que las autoridades hondureñas “no dejan salir del hotel” a los periodistas venezolanos, y no ofreció más detalles. Eso si, Chávez acusó a Micheletti de ordenar directamente el arresto de los periodistas venezolanos.

          Desde La Habana, el tirano Fidel Castro, dice en una de sus reflexiones que muere el golpe o mueren las constituciones. Cuando el Presidente de Estados Unidos Barack Obama, de viaje en Moscú para abordar temas vitales en materia de armas nucleares, declaraba que el único presidente constitucional de Honduras era Manuel Zelaya, en Washington la extrema derecha y los halcones maniobraban para que éste negociara el humillante perdón por las ilegalidades que le atribuyen a los golpistas.

          Está probado que cuando Zelaya anunció que regresaría el 5 de julio, estaba decidido a cumplir su promesa de compartir con su pueblo la brutal represión golpista, dice Castro. Me consta que en pleno vuelo, cuando se aproximaba a Tegucigalpa se le informó desde tierra de la enorme masa que lo esperaba en el exterior del aeropuerto estaba siendo atacada por los militares con gases lacrimógenos y fuego de fusiles automáticos. Su reacción inmediata fue pedir altura para denunciar los hechos por Telesur y demandar a los jefes de aquella tropa que cesara la represión. Después les informó que procedería al aterrizaje. El alto mando ordenó entonces obstruir la pista. En cuestión de segundos vehículos de transporte motorizado la obstruyeron. Tres veces pasó el Jet Falcon, a baja altura, por encima del aeropuerto. Los especialistas explican que el momento más tenso y peligroso para los pilotos es cuando naves rápidas y de poco  corte, como la que conducía al Presidente, reducen la velocidad para hacer contacto con la pista. Por eso pienso –dice FC- que fue audaz y valiente aquel intento de regresar a Honduras.

          No creo que Zelaya quiera inmolarse y trate de regresar a Honduras por cualquier vía y se vea forzado a admitir que maniobras dilatorias irán apagando sus deseos de convertirse en un mártir por sus estúpidas actuaciones. Su derrocamiento fue obra suya el pretender reelegirse violando la Constitución de la República de Honduras. Hoy lunes 13 Micheletti suspendió el toque de queda y reiteró que no se permitirá el regreso de Zelaya.

7/12/09                                                000ooo000   

 

 

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