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Chávez en su peor momento

Por

Francisco H. Tabernilla

 

 

El periodista Casto Ocando de El Nuevo Herald nos ofrece dos informaciones muy importantes sobre la situación actual en Venezuela que se ha ido deteriorando vertiginosamente acompañada de manifestaciones estudiantiles que continuaron en su segunda semana en Caracas y en otras ciudades frente a una dura presión oficial, en medio de nuevos indicios de que Chávez planea endurecer su posición de dictador- demócrata ante los graves problemas económicos, políticos y un creciente descontento popular. Hasta ahora las protestas han dejado dos muertos y centenares de heridos y detenidos. A la situación económica se suman la delincuencia descontrolada, el cierre de medios de comunicación, la corrupción administrativa y el colapso de los servicios públicos.

          Las protestas han hecho revivir el liderazgo estudiantil, con nuevos dirigentes como Roderick Navarro, un estudiante de la Universidad Central de Venezuela. “No vamos a dejar de protestar, seguiremos en las calles, no importa lo que haga el gobierno”, advirtió Navarro la semana pasada durante una manifestación sorpresiva que lideró frente al canal oficial Venezolana de Televisión (VTV), en Caracas, para condenar el cierre del canal privado RCTV.

          Entre los militares, el malestar ha subido de tono. La pasada semana dos ex comandantes que acompañaron a Chávez en el fallido golpe militar del 4 de febrero de 1992 contra el presidente Carlos Andrés Pérez solicitaron públicamente su renuncia. Los comandantes en retiro Joel Acosta Chirinos y Jesús Urdaneta que conspiraron  junto a Chávez desde 1982, expresaron que éste ya no tiene “autoridad moral” para gobernar.

Chirinos destacó el deterioro de los servicios públicos y una crisis económica inexplicable en medio de un período de abundancia petrolera. Según los analistas, la economía ha caído en un estado recesivo que se profundizará este año, mientras el resto de América Latina se recupera. “La inflación podría superar este año un 50 por ciento, una cifra sin precedentes”, dijo a El Nuevo Herald Robert Bottome, presidente de Veneconomía, una firma de análisis y asesoría económica con sede en Caracas. Bottome precisó que la crisis se ha agudizado por una combinación de medidas económicas y monetarias tomadas en los últimos meses, entre ellas la devaluación del bolívar, la confiscación de propiedades privadas y el control de precios de productos de primera necesidad.

          El proyecto chavista, iniciado el 4 de febrero de 1999, ha ido perdiendo sus altos índices de popularidad debido a su radicalización izquierdista, sobre los últimos seis meses. En este período se intervinieron centenares de miles de hectáreas de tierras particulares, han cerrado miles de tiendas y comercios, y se incrementó el número de juicios contra opositores. Asimismo se han creado nuevas leyes para ampliar el control estatal de la propiedad privada, incluyendo medios de comunicación. Por primera vez en seis años la moneda ha sido devaluada. La última encuesta de Hinterlaces, una de las más importantes encuestadoras del país, reveló en diciembre un 55 por ciento de rechazo a Chávez, en contraste con un 39 por ciento de aceptación.

          Por otra parte la llegada del “comandante de la revolución “Ramiro Valdés a Venezuela. Artífice de los servicios de seguridad cubanos, es otro indicio de que el presidente Hugo Chávez enfrenta una seria crisis y de que aumentará, como lo está haciendo, la represión contra los opositores. Chávez rechazó las críticas contra la comisión cubana y reafirmó que la presencia de Ramiro Valdés es parte de los acuerdos de colaboración y cooperación entre ambos gobiernos.

          Para el general cubano José Quevedo, que conoció de cerca a  Ramiro Valdés, se trata de una jugada de última hora, “tratando de cerrar el dominó por los dos lados”. “Recomiendo a los venezolanos que se cuiden mucho, porque la represión va a ser más fuerte”, afirmó el general Quevedo que estima “se trata de los últimos suspiros que están dando ambos regímenes”, “pero en definitiva no van a poder controlar al pueblo venezolano, ni aunque manden 20 Ramiros”, puntualizó.

          “La llegada de Ramiro Valdés a Caracas indica que la crisis que tiene Chávez es muy grave, que la revolución bolivariana está en su peor momento, y que no está en sus manos resolver la situación”, afirmó Eugenio Yanez, experto en temas cubanos que dirige el grupo de pensamiento Cubanálisis.  Ramiro Valdés arribó para asesorar a los venezolanos sobre la crisis eléctrica, indicó Chávez. Desde el primer momento, la visita desató las críticas de la oposición. Según Yanez, Ramiro Valdés es el tercer hombre en la isla, después de los hermanos Castro. Bajo su mando Cuba forjó sus eficaces servicios de seguridad en estrecha colaboración con la desaparecida KGB soviética, la Stasi alemana y otras agencias de inteligencia de los países que integraron la órbita comunista. “Si Chávez pierde el poder, Cuba se queda en el aire”, declaró Yanez.

          Para el general Marcos Ferreira, que dirigió los servicios venezolanos de identificación y extranjería hasta el 2002 y está exiliado en Miami, dijo que Ramiro Valdés va a ser el cancerbero de Chávez, agregando que Chávez podría usar a Ramiro

 Valdés para reemplazar cuadros del chavismo y ampliar el control de las Fuerzas Armadas. (Para nada bueno será, agregamos nosotros los cubanos, que sí lo conocemos bien).

2/08/2010                                             000ooo000

 

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