USA FIRME EN EL CUMPLIMIENTO DE LA LEY
Por
Francisco
H. Tabernilla
Nuestros
lectores recordarán que el tirano de Cuba, Fidel Castro, declaró a la prensa en
una de sus públicas apariciones, precisamente el 26 de julio de este año que
“la liberación de los cinco espías estaba muy cerca…mucho antes del fin del
año”. Fidel Castro repitió su predicción una semana después diciendo: “No hay
ninguna adivinanza en esto”.
Las especulaciones volvieron a dispersarse
cuando el gobernador de Nuevo México, Bill Richardson, un demócrata muy cercano
a la administración de Barack Hussein
Obama, visitó a Cuba entre el 22 y 27 de agosto, 2010, lo que su
despacho describió como una misión de promoción de comercio. Varios blogs en
Cuba especularon que él trataría de negociar un canje.
Richardson consiguió la liberación de tres
presos políticos cubanos después de una visita en 1996, y ha negociado la
liberación de ciudadanos americanos detenidos en Corea del Norte, Irak y Sudán.
Richardson dijo a la prensa en La Habana que la administración le había pedido
que presionara a Cuba para la liberación de Alan Gross, un norteamericano que
lleva varios meses en prisión en Cuba y no ha sido acusado formalmente.
El Departamento de Estado negó rotundamente
el jueves 2 de septiembre, 2010, que se esté considerando canjear a cinco
espías cubanos encarcelados en Estados Unidos por un subcontratista americano
preso en La Habana. Esto constituye una negativa directa a las predicciones de
Fidel Castro a la prensa internacional recientemente. Pero hay que destacar que
la negativa tuvo lugar un día después de que cubanoamericanos en el Congreso
expresaron su preocupación sobre reportes de que se estaba negociando un acuerdo
para liberar a Alan Gross, quien permanece detenido sin cargos desde su arresto
en La Habana el 3 de diciembre, 2009.
“Estados Unidos no está considerando poner
en libertad a ninguno de los cinco espías cubanos a cambio de Alan Gross”, dijo
Mark Toner, director de la oficina de prensa del Departamento de Estado.
“Estamos comprometidos a usar todos los
canales diplomáticos posibles para ejercer presión por la liberación del señor
Alan Gross, pero no consideramos la posibilidad de un canje de presos”, agregó
Toner en un correo a El Nuevo Herald. “Seguimos urgiendo al gobierno cubano a
que ponga en libertad a Alan Gross inmediatamente”.
En cartas enviadas a los Departamentos de
Estado y de Justicia, los cinco cubanos miembros del Congreso escribieron que
estaban “seriamente preocupados sobre crecientes reportes de que la
administración estaba llevando a cabo negociaciones con el régimen comunista de
Castro para un canje.
“EEUU tiene que tener cuidado de no enviar
señales a estados delincuentes de que ellos pueden extorsionar con éxito a
nuestro gobierno por medio de secuestrar a norteamericanos inocentes”, dijeron
los representantes republicanos sudfloridianos Ileana Ros-Lehtinen y Lincoln y
Mario Díaz Balart, conjuntamente con el senador Bob Menéndez y el representante
Albio Sires, ambos demócratas de Nueva Jersey.
Ellos señalaron que uno de los cinco espías
cubanos convictos en Miami en el 2001 fue hallado culpable de haber jugado un
papel importante en el derribo por parte de Cuba de dos aviones de los Hermanos
al Rescate en 1996 en el que murieron cuatro ciudadanos americanos. “Tenemos la
esperanza de que esos reportes de canjes sean infundados. No obstante, de ser
correctos, pedimos con todo respeto que esos esfuerzos cesen de inmediato”, agregaron. “No hay razón para las preocupaciones
expresadas en la carta por los miembros del Congreso”, agregó Toner.
Cuba ha exigido por largo tiempo la
liberación de sus cinco espías (héroes de la patria
lo
clasifican ellos) quienes están cumpliendo condenas entre 15 años a cadena
perpetua, y el presidente designado Raúl Castro ofreció en el año 2000
canjearlos por los presos políticos de la isla.
Pero rumores de un posible canje comenzaron
a difundirse tras el arresto de Gross subcontratista de la Agencia por el
Desarrollo Internacional de EEUU quien llevó equipos de comunicación vía
satélite a grupos judíos en Cuba.
Al régimen comunista-terrorista de los
Castros no hay que darle tregua ni concesiones sino exigirle que cumpla con los
tratados internacionales que ha firmado de los cuales se burla descaradamente,
respete los derechos humanos y la dignidad plena del hombre. La administración
del presidente Obama se ha plantado firme y decidida, por lo que se ve, a que
la ley y la justicia sigan imperando en la nación más generosa del mundo. Ya
que no obstante los embates que hemos recibido de naciones democráticas que nos
han dejado solos y a la deriva, seguimos luchando con fe y esperanza y con la
convicción infinita en Dios que nos alienta en nuestra desesperación por
terminar con los 51 años de dictadura totalitaria y absoluta que subyuga al sufrido
pueblo cubano.
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9/06/2010