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Se teme estalle la violencia en Venezuela
Por
Francisco H. Tabernilla
El ex presidente del Consejo de Seguridad de las
Naciones Unidas (ONU), Diego Arria, sostiene que los 13 años de gobierno del
presidente Hugo Chávez han sido una tragedia para Venezuela. El país ha
retrocedido décadas pese a que el mandatario ha recibido más de $1 billón en
renta petrolera y el deterioro es tan marcado que si un paracaidista aterrizara
en el territorio nacional, sin importar donde lo hiciese, lo primero que
notaria es “el colapso de la infraestructura, la pobreza, el abandono del campo
y la suciedad de las ciudades”, afirmo el diplomático en una entrevista. Pero
esto no es lo que más inquieta al ex embajador venezolano ante la ONU, más
preocupante aún es el clima de odio que Chávez ha instaurado entre los
venezolanos que lleva a la población cada vez más cerca de una guerra civil.
“El
lenguaje crudo, grosero, y ofensivo que utiliza el jefe de Estado, y que sus
seguidores propagan con los medios de comunicación, han creado una división
entre los venezolanos que jamás hemos tenido en nuestra historia”, dijo Arria,
quien durante su paso por la ONU pudo ver de cerca las condiciones que
generaron la implosión social de Bosnia y Ruanda. “El odio significa que Chávez
ha logrado emponzoñar y envenenar el espíritu de los venezolanos” señaló el
periodista Antonio María Delgado en El Nuevo Herald
en entrevista con el diplomático venezolano.
Arria pudo
constatar recientemente el grado de conflictividad que padece Venezuela. Se
encontraba de gira en el país el mes pasado cuando él junto a sus acompañantes
fueron interceptados y luego golpeados por un grupo de personas vinculadas al
oficialismo, cerca de San Carlos, capítal del estado
Cojedes. “Yo no había visto miradas de odio tan fuertes en mi país”,
comentó el diplomático. “Me recordó lo que ví en Yugoslavia, entre los serbios y musulmanes, o lo que
vimos en Ruanda”, donde cerca de 800,000 personas fueron asesinadas en tres
meses de violencia étnica. El odio es compartido por igual entre los seguidores
y los opositores del presidente Chávez, pero existe una gran diferencia entre
los dos grupos: los partidarios de Chávez reciben armamento de guerra y son
entrenados para usarlo con el propósito de defender la “revolución”.
Son varios
los grupos armados por el gobierno, siendo algunos de ellos más violentos que
otros. También varían en tamaño. El mayor de ellos es el
cuerpo de milicianos, con una fuerza de 125,000 hombres y mujeres que el
gobierno aspira incrementar a 300,000. Según Arria, todos estos grupos armados
constituyen para las fuerzas democráticas del país un riesgo incluso mayor de
lo que podrían representar los elementos leales a Chávez dentro de las Fuerzas
Armadas a la hora de un conflicto.
“No puedo
concebir que las Fuerzas Armadas saquen estos tanques rusos que compró el señor
Chávez para atacar a la población, o estos aviones Sukoi
para bombardear las ciudades de Venezuela. Eso no lo harán jamás las Fuerzas
Armadas venezolanas, pero yo sí creo que estos grupos paramilitares civiles
peligrosos son capaces de cualquier cosa”, sostuvo Arria.
Ante este
peligroso escenario hay que sumarle la presencia de las bandas de
narcotraficantes que operan con impunidad en el país bajo la protección de
altos funcionario del gobierno.
Otro
elemento de preocupación son los 70,000 cubanos que se encuentran en el país, miles de ellos pertenecientes a
organismos de seguridad del país caribeño que están infiltrados en los cuerpos
de seguridad de Venezuela. Todas estas organizaciones tienen interés en
preservar el régimen de Chávez, lo que eleva el riesgo de violencia en el país,
dijo Arria. Este escenario dificulta los prospectos de una transición pacífica
en el país, y el potencial de violencia es tal que un eventual gobierno podría
verse obligado a buscar ayuda internacional para salvar vidas.
El nuevo
gobierno también tendría que purgar de inmediato a las Fuerzas Armadas y los
organismos de seguridad para instaurar oficiales y funcionarios que sean leales
al Estado y no a los intereses de la revolución bolivariana.
Venezuela
tiene un régimen casi absolutamente militarizado, y militarizado con los
oficiales de menor calidad dentro de las Fuerzas Armadas, si nosotros no
comenzamos por ese primer paso de desmontar el aparato militar que ha tomado
posesión del estado venezolano no podremos salir adelante, comentó Arria. “Hoy
en día hay más de 2,000 oficiales de rango medio y alto en posiciones
ejecutivas que tradicionalmente han sido para los civiles. O sea, cómo
desmontar
la bota militar, va a ser de una alta complejidad”.
Un nuevo
gobierno también debería emprender un “inevitable” proceso de reunificación y
de tratar las injusticias cometidas en el país a lo largo del mandato de Chávez
sin que esto se convierta en una cacería de brujas. Es decir, la justicia debe
prevalecer sobre la venganza en este proceso. Según Arria el país requiere una
profunda transformación que deje a un lado el sistema militarista creado por
Chávez y no solo cambiar el actual gobierno con un nuevo jefe.
La
transformación podría incluir una reforma presidencial para reducir el período
presidencial a tres años en vez de los actuales seis, en vista del doloroso
período de transición que viene en ciernes sobre Venezuela para poder
estabilizar el deterioro del país. Las medidas que hay que aplicar son tan
fuertes que el nuevo gobierno podría no sobrevivir más de tres años. El próximo
presidente debe estar totalmente entregado al servicio de una verdadera unidad
nacional, de un rescate nacional, y ese
es un ejercicio muy desgastador, pero un servicio fundamental, añadió Arria.
Realmente
las experiencias vividas por el diplomático venezolano y sus sabios consejos
por el bienestar de su patria son dignas de tomarse en consideración y
contribuirán mucho a la recuperación y organización jurídica de la nación; y
mientras escribía estas líneas no podía apartar a Cuba de mi mente pensando que algo por el estilo o peor
ocurrirá en mi patria cuando se desplome el régimen comunista que ha destruido
al país que antaño se conocía como la “Perla del Caribe” y el “París de las
Américas”
09/23/2011 000ooo000